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viernes, 5 de febrero de 2010

Cegera, Corriendo.

Su arena era la calle completa, los autos estorbaban pero se atrevia a esquibarlos. Los arboles eran su salvacionantes de ser atropellada, pero cuanod llego a su meta... Dejo de correr a la altura del puente, cruso sin problemas con paso acelerado pero caminando al fin.
Finalisando el cruce, sus ojos se nublaron, la luz del ocaso no la ayudaban demaciado para ubicarse espacialmente, faltaba aire, el aliento no la abastecia, sus piernas temblaban y su estomago se estremesia. No entendia nada, correr no tenia que marearla ni tampoco producierle un desmallo.

Por primeravez habia corrido.
Pero el amor era algo muy nuevo en su corazon como para saber interpretarlo...

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