Los invito a escuchar de mi gasdada vos lo que uds no intentaran comprender.
Vienen a atacar a una imagen que desconosen, está acompañada de historias.
Los invito a escuchar mi cancion, que los distrae, los puño que indiscriminadamente alzan al aire, se detienen, al escuchar su historia en la mia.
De mis mis lagrimas se hiso un lago, y en un mar me undi.
Pobre de ti si nunca conseguiste esa niña de rosas,
pobre de ti si la tubiste mientras con la brisa la dejaste volar.
Puede que mañana la encuntres, puede que esa sonrisa sea solo una escapatoria para ll que esconden detras sus manos lastimadas.
Que cuenta mi cancion? Que cuenta la tuya?
Por que todos frenan a escuchar mi cuento si es igual al suyo? La novedad no esta de visita.
Invito a uds señores de pacion a tomar un poco de mi miel, de sufrir lo que yo, cada sensacion agrabando mientras batia las riendas detras del cadaber fresco.
Prueben los golpes de una historia, prueben lo que hay detras de la compacion.
No señores, no es compacion lo que todos sienten ahora, los acuso de egoistas como a todos los demás. No por mi dolor refleccionan sus mentes, no por lo que me afecta, solo por lo que significo a sus hojos.
Un simple reflejo de lo que sientes, un estupido presente que con brasos abiertos acepto himnotisado. Soy como ustedes señores del viento. Demostrandolo es como hoy sobrevivo a sus nabajas oxidadas.
Me temes? Despues de distorcionar el vidrio atraviesas su cristalina escructura. Asi no significo una amenaza, asi soy lo que ves sin tus ojos, asi soy una flor entre las hojas de "La niña de los Cerrillos". Me criaste en la cuna de laguna, proyectando el cisne blanco transformado en prinsesa puntillosa, bestidas de suabes gasas, adornada de rocio, corriendo por sus imacunables tobillos nieve.
Una imagen de mujer me han regalado, como rechasar un honor semejante a ser tu madre?
Sere madre tuya hijo, aunque me llames padre, te cuidare como las femenidades aladas a los niños del cielo.
Del tango he cobrado un hijo y se llamara Gustabo Soledad.